La reunión originalmente fue pautada para elegir de las 4 opciones, el sitio más adecuado para construir la planta. Más de 95 residentes de ambos Condados (Broward y Miami-Dade) manifestaron su inconformidad de poner un incinerador cerca de sus hogares, vale la pena destacar que los residentes de Doral soportaron la presencia de un incinerador durante más de 23 años desde la incorporación de la ciudad.
Después de un año y 9 meses continúan las reuniones para decidir ubicación de la nueva planta de procesamiento de basura del condado Miami-Dade.
Sin embargo, esta decisión fue aplazada hasta el 6 de noviembre, un día después de las elecciones presidenciales, luego de que los residentes de Miramar en el suroeste de Broward protestaran en el Downtown de Miami contra la opción de construir el nuevo incinerador cerca de su ciudad.
El incendio en el incinerador en Doral que quemaba la mitad de los deshechos del condado dejó a muchos residentes con temor y preocupaciones.
Los estudios que ha considerado la alcaldesa y la comisión indican que se trata más bien de una planta de conversión de deshechos a energía y que no resultaría en contaminación, además que está a media milla del vecindario más cercano de Miramar.
El gobierno condal ha estado estudiando tres opciones en Medley o en el antiguo aeropuerto Opa-Locka West cerca de Miramar o en el mismo sitio en Doral que está a 500 pies del vecindario más cercano. La alcadesa de Miami-Dade recomendó Opa-Locka West, algo con lo que la alcaldesa de Doral Christi Fraga está de acuerdo.
“Tengo entendido que esta reunión es para elegir un sitio sostenible para un campus de residuos sólidos”, aseguró Juan Carlos Esquivel, director de Doral Voice cuando se dirigió al panel de comisionados.
En la reunión de vecinos del día lunes, la alcaldesa Levine Cava mencionó que el sitio apropiado se utilizará para múltiples tecnologías de gestión de residuos. “¡No han elegido la tecnología!”, insistió Esquivel.