Con información de CNN.

Tres niños ciudadanos estadounidenses fueron deportados a Honduras con sus madres,  incluyendo uno de 4 años que recibía tratamiento para cáncer metastásico, según los abogados de las familias y organizaciones de derechos civiles e inmigración.

En un caso, una madre fue deportada con su hijo de 2 años, mientras que en el otro se trata de otra madre deportada con sus hijos de 4 y 7 años, según informaron la Unión estadounidense de Libertades Civiles (ACLU) y el Proyecto Nacional de Inmigración (NIP), entre otras organizaciones, en un comunicado de prensa el viernes.

Todas fueron detenidas cuando las mujeres asistían a reuniones rutinarias con funcionarios en Louisiana como parte del Programa de Comparecencia bajo Supervisión Intensiva (ISAP), según sus abogados y registros judiciales.

En conjunto, los defensores de las familias afirman que sus deportaciones de Estados Unidos subrayan la preocupación por la falta de debido proceso en medio de la ofensiva migratoria del Gobierno de Trump.

“Presenciamos en tiempo real una erosión del debido proceso”, declaró Gracie Willis, abogada y coordinadora de respuesta a redadas del Proyecto Nacional de Inmigración, quien representa a la niña de 2 años a través de un amigo de la familia que actúa como peticionario en el caso judicial en curso. “Esto es profundamente preocupante y estos casos son un ejemplo de ello”.