Con información del Diario las Américas.
Tras la declaratoria de culpabilidad contra el expresidente colombiano Álvaro Uribe Vélez por el delito de soborno en actuación pena. Líderes, activistas y ciudadanos colombianos residentes en el sur de la Florida, rechazaron la acción judicial calificándola como un acto de “persecución política” que pone en riesgo la estabilidad democrática en Colombia.
En una rueda de prensa en la ciudad de West Miami, el alcalde local, Eric Diaz-Padrón, calificó a Uribe como “una figura muy importante de los últimos tiempos en Colombia” y se solidarizó con su causa.
Fabio Andrade, comisionado de la ciudad de Weston y líder de la comunidad colombiana en el sur de la Florida, fue uno de los más enfáticos al expresar su rechazo al fallo. “Este es un plan maquiavélico para afectar la democracia colombiana”, dijo, y añadió que se trata claramente de un “juicio político”.
Andrade subrayó que los lazos entre la comunidad colombiana y los líderes del sur de la Florida son recíprocos y firmes. Pidió un aplauso para la congresista Elvira Salazar, ausente por encontrarse fuera del condado, y elogió el respaldo constante de los congresistas Carlos Giménez y Mario Díaz-Balart.
“Estamos aquí para decir que el expresidente Uribe es un hombre inocente”, afirmó Andrade. “Esto no es más que una utilización perversa de la justicia”.
Durante la reunión también se pronunció el congresista David Borrero, hijo de padre colombiano, quien alertó que muchos ciudadanos están saliendo del país sudamericano por miedo.
“No entiendo cómo acusan a un presidente que fue pieza clave en la lucha contra la guerrilla y el narcotráfico”, declaró, al tiempo que pidió “total imparcialidad” a la justicia colombiana. Para Borrero, Colombia “siempre ha sido una torre fuerte para la justicia, y ahora observa un cambio preocupante”.