Con información de Miami Diario 

Durante el mes de septiembre, el comisionado del condado de Broward, Mark Bogen, impulsó una evaluación en el agua que surte a seis ciudades. Luego de un exhaustivo análisis, el líquido arrojó altos niveles de sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas.

Este tipo de químicos tóxicos conocidos como PFAS o sustancias permanentes, motivó a los miembros de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) a evaluar la situación con el fin de tomar medidas.

Los expertos de EPA advirtieron que casi la mitad del agua que sale del grifo en todo el país tiene estas sustancias tóxicas. Sin embargo, en las ciudades Coral Springs, Margate, Coconut Creek, Fort Lauderdale, Deerfield Beach y Pompano Beach se encontraron niveles significativamente superiores.

Algunas muestras exponen que el líquido que corre por las griferías, hacia aeropuertos y bases militares, contiene sustancias tóxicas más concentradas. En cuanto a las afecciones, aún se están evaluando cuáles son los posibles problemas que estos químicos podrían causar en los seres humanos y el ambiente.

Por ahora, las agencias federales trabajan para acordar una medida como modernización de plantas de agua en Broward y otros condados en el futuro. Los expertos aseguran que, los filtros evitan que una gran cantidad de sustancias tóxicas se cuelen en el agua de la grifería.