Con información de DW 

Los nuevos aranceles afectan a sectores descritos por la Casa Blanca como «vitales para el futuro económico y la seguridad nacional de Estados Unidos» y entre los que figuran el acero, el aluminio, los semiconductores, los vehículos eléctricos, las baterías, los paneles solares, las grúas de descarga de buques y los productos médicos.

El anuncio se produce en plena campaña para las elecciones del 5 de noviembre y en un momento en el que Biden, que busca la reelección, ha adoptado un tono cada vez más duro con China a pesar de haber abierto un diálogo con Pekín, en un intento por conquistar a la clase trabajadora de EEUU y alejarla del expresidente Donald Trump, futuro candidato republicano.

Algunos de los aranceles anunciados por la Casa Blanca en un comunicado entrarían en vigor en 2025 o 2026, por lo que en realidad su implementación dependerá de quién gane los comicios.

Es el caso de las baterías de iones de litio, para permitir un período de transición, a medida que el país aumenta su producción nacional de baterías, dijo a la prensa un alto funcionario estadounidense bajo condición de anonimato. El arancel más contundente afecta a los vehículos eléctricos y pasará del 25 al 100% este año.

Ese enorme incremento responde al sustancial aumento de las exportaciones de vehículos eléctricos de China a Estados Unidos, que crecieron un 70% entre 2022 y 2023, algo que Washington percibe como una amenaza para el desarrollo del mercado interno de estos automóviles.

Biden quiere que hasta dos tercios de los nuevos carros vendidos en Estados Unidos sean eléctricos en 2032 y, para ello, ha impulsado diferentes programas para incentivar su producción.

Otra subida arancelaria significativa recae sobre las baterías utilizadas en los vehículos eléctricos, un mercado que China controla en un 80%, gracias a su dominio en la minería, procesamiento y refinado de minerales críticos. En concreto, según la Casa Blanca, los gravámenes sobre las baterías de iones de litio pasarán del 7,5 al 25 por ciento este año, mientras que el arancel sobre las baterías de iones de litio no destinadas a vehículos eléctricos aumentará del 7,5 al 25 por ciento en 2026.

El arancel sobre las piezas de baterías pasará del 7,5 al 25% este año, y el de grafito natural e imanes permanentes pasará del 0 al 25 por ciento en 2026. Por último, el arancel para otros minerales críticos subirá del 0 al 25 por ciento en 2024.