Con información de DW.
El gobierno federal de Estados Unidos anunció este lunes que el auxilio alimentario del que se benefician aproximadamente 42 millones de ciudadanos se disminuirá casi en un cincuenta por ciento a partir de noviembre, a causa de la inmovilización presupuestaria en el país.
La Casa Blanca utilizará $4.650 millones de dólares procedentes de un fondo de contingencia para solventar los desembolsos relacionados con el programa SNAP, el principal esquema público de apoyo nutricional del país.
Este pronunciamiento sucede a una determinación de un juez federal de Providence, uno de los dos magistrados que la semana anterior conminaron al gobierno a emplear recursos de emergencia para garantizar la continuidad del programa SNAP.
La administración de Donald Trump sostiene que el programa está agotando sus recursos luego de un mes de «parálisis administrativa«, ya que los demócratas y republicanos no han logrado un acuerdo para promulgar un nuevo presupuesto y se imputan mutuamente la responsabilidad de la situación crítica.
El mandatario aseguró el viernes que estaba dispuesto a liberar los capitales requeridos si el poder judicial así lo determinaba y enfatizó que no desea «que los estadounidenses padezcan hambre«.