Con información de DW.
En medio de la tercera semana de cierre del gobierno, la Casa Blanca advirtió que es probable que se realicen más de 10.000 despidos de empleados federales como consecuencia del estancamiento presupuestario en el Congreso.
Russell Vought, director de la Oficina de Gestión y Presupuesto, confirmó la cifra y declaró la intención de la administración Trump de ser «muy agresivos» en la reducción de la burocracia.
Esta medida aumenta la coacción sobre los legisladores demócratas para que aprueben la financiación del gobierno.
Documentos del Departamento de Justicia ya revelan que más de 4.000 trabajadores fueron cesanteados la semana pasada, afectando principalmente a los departamentos del Tesoro, Salud, Educación y Vivienda.

