Con información de Infobae.
La ciudad de Chicago se convirtió en el epicentro de un nuevo operativo de las autoridades migratorias, con la colaboración de diversas agencias federales.
El Departamento de Justicia destacó que este operativo, fue descrito como una respuesta a una “emergencia nacional”, marcando así un incremento significativo en las medidas de control migratorio en Estados Unidos.
De acuerdo con el comunicado oficial, el operativo incluye la participación de agencias como el FBI, la Administración para el Control de Drogas (DEA), la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) y el Servicio de Alguaciles de los Estados Unidos (U.S. Marshals). Estas entidades, junto con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), han iniciado lo que se denomina “operaciones dirigidas mejoradas” en Chicago, con el objetivo de garantizar la seguridad pública y la seguridad nacional al retirar de las comunidades a individuos considerados como “criminales peligrosos”.
Mientras que el subprocurador general interino, Emil Bove, viajó a Chicago para supervisar el despliegue de estas acciones. En un comunicado, Bove afirmó que estas medidas son una respuesta a lo que calificó como “cuatro años de políticas migratorias fallidas”.
El operativo en Chicago forma parte de un esfuerzo más amplio que se extenderá a otras ciudades del país en los próximos días. Según detalló CNN, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) emitió una directiva que otorga a las agencias del Departamento de Justicia autoridad para llevar a cabo acciones de control migratorio.