Con información de EFE.

El Departamento de Eficiencia Gubernamental de Estados Unidos (DOGE), liderado por Elon Musk, está presionando para acceder a datos personales de carácter fiscal de millones de estadounidenses.

Según varios medios de comunicación dicho departamento se afana en conseguir acceso a un sistema vinculado al Servicio de Impuestos Internos (IRS) de EE.UU. -similar a Hacienda en otros países- para supuestamente erradicar operaciones de fraude.

«La medida ha puesto nerviosos a los empleados de la agencia y a los expertos en privacidad, que advierten de que conceder a los agentes políticos acceso a información tan privada podría ser realmente peligroso», detalla el medio ABC News.

Se trata del conocido como Sistema Integrado de Recuperación de Datos (IDRS), desde el que los empleados de IRS pueden revisar información fiscal de los contribuyentes, actualizar sus registros y trasladarles avisos.

Entre los datos personales que figuran en esta plataforma destacan el número de la Seguridad Social -fundamental en EE.UU. para cualquier gestión burocrática- y la dirección de una persona, así como detalles sobre cuánto gana o cuánto dinero debe.

Pese al ahínco del DOGE para acceder a este sistema, la Casa Blanca no ha concretado cómo lo utilizaría para detectar y penalizar fraudes en el caso de que contara con el permiso para hacerlo.

De hecho, con operaciones como esta del DOGE existe un gran recelo en parte de la sociedad estadounidense de que puedan ser usadas para atacar por motivos políticos a voces críticas con la Administración Trump.