Con información de DW.
Documentos judiciales recientemente revelados detallan un acuerdo en el que Estados Unidos se comprometió a pagar $4.76 millones a El Salvador a cambio de que este país reciba a más de 200 migrantes deportados. Los detalles del pacto, hasta ahora desconocidos, salieron a la luz como parte de una demanda presentada por la organización de derechos civiles Democracy Forward.
El acuerdo, firmado entre las administraciones de los presidentes Donald Trump y Nayib Bukele, se formalizó en una carta del Departamento de Estado de EE. UU. al gobierno salvadoreño, fechada el 22 de marzo de 2025. Los fondos, de acuerdo con el documento, están destinados exclusivamente a apoyo penitenciario y logístico para la detención de migrantes, en su mayoría venezolanos, en el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT).
La carta estipula que los fondos no pueden ser utilizados para brindar asistencia legal a solicitantes de asilo en EE. UU. ni para referirlos a abogados. También se restringe su uso para la UNRWA, la agencia de la ONU para refugiados palestinos, o para servicios de salud reproductiva.
La presidenta de Democracy Forward, Skye Perryman, criticó el acuerdo, señalando que «no hizo nada para garantizar de forma significativa que las personas desaparecidas de EE. UU. a la infame prisión salvadoreña CECOT estuvieran protegidas de la tortura, el confinamiento indefinido u otros abusos«. En cambio, el acuerdo sí se esforzó en restringir el uso de los fondos para la atención médica reproductiva y la asistencia a solicitantes de asilo.

