Con información de CNN  

A dos meses de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, los hispanos se mantienen como una de las fuerzas decisivas en el panorama electoral. Los votantes de ese origen no solo representan una porción significativa del electorado, sino que también llevan consigo una serie de preocupaciones que podrían definir el futuro del país.

Los hispanos en Estados Unidos representan casi la quinta parte de una población total de 331 millones de personas, de acuerdo con el último censo de 2020. De esta cifra, al menos 36.200.000 son elegibles para votar este año en las elecciones presidenciales, según el Pew Research Center.

Los latinos son uno de los grupos raciales y étnicos que más rápido ha crecido, después de los asiáticos, de acuerdo con esa organización.

Según Mark Hugo López, director de Investigaciones de Raza y Etnicidad en el Pew Research Center, en 2024, 36 millones de latinos están habilitados para votar en las elecciones de Estados Unidos, un número mucho mayor que entre la población negra. Los latinos representan el 14,7% de todos los votantes habilitados para sufragar en noviembre de 2024, de acuerdo con las proyecciones. “Pero también ellos están en los estados que son claves para esta elección, en Arizona ellos son el 25% de los votantes”, puntualizó.

«En Nevada, ellos representan el 20% de los votantes. Pero también en estados como Georgia Pensilvania, Carolina del Norte o Michigan alcanzan el 5% de los votantes», agregó.

Para la población latina en Estados Unidos, los asuntos más importantes este año son la economía, la inflación y el desempleo, según el Pew Research Center. De acuerdo con López, la inmigración es importante también, pero no es el primer tema. Los estados que más albergan votantes hispanos son California con 8,5 millones, seguido por Texas, 6,5 millones, Florida, 3,5 millones, Nueva York, 2,2 millones, y Arizona con 1,3 millones. Sin embargo, de los 36 millones, no todos van a votar.

López aseguró que una de las barreras de los votantes latinos es el desconocimiento de cómo registrarse para votar. «Casi la mitad vive en dos estados, California y Texas. Y con Florida, completa casi el 55% de esa población».