Con información de Infobae.

Frank Athen Walls, de 58 años, fue ejecutado mediante inyección letal en la Prisión Estatal de Florida, convirtiéndose en el recluso número 19 en recibir la pena capital en el estado durante este año.

Esta cifra marca un hito histórico, superando el récord previo de ocho ejecuciones en 2014.

Walls fue condenado por una serie de asesinatos ocurridos entre 1985 y 1987 en el condado de Okaloosa, crímenes que aterrorizaron a la comunidad por su naturaleza violenta y sexual.

A pesar de que su defensa presentó múltiples apelaciones alegando discapacidad intelectual, la Corte Suprema de Florida y el Tribunal Supremo de EE. UU. rechazaron los recursos, permitiendo que se cumpliera la orden firmada por el gobernador Ron DeSantis.