Con información de EFE.
La comunidad de Minneapolis se encuentra en estado de shock y luto tras un tiroteo devastador en una escuela católica que resultó en la muerte de dos niños y dejó a otras 17 personas heridas.
El jefe de la policía de Minneapolis, Brian O’Hara, y el alcalde Jacob Frey confirmaron que las víctimas mortales son dos niños de ocho y diez años, quienes fueron asesinados en sus pupitres durante el ataque.
O’Hara también informó que, afortunadamente, se espera que los 17 heridos, que incluyen a 14 menores de entre seis y quince años y tres adultos, sobrevivan a sus lesiones.
El trágico suceso ocurrió alrededor de las 08:30 de la mañana en la iglesia católica romana de la Anunciación, al inicio del curso escolar. El jefe de policía O’Hara detalló la escalofriante cronología: un hombre armado se acercó al edificio desde el exterior y, usando un rifle, comenzó a disparar a través de las ventanas de la iglesia hacia los niños y feligreses que asistían a una misa.
El agresor portaba un arsenal compuesto por un rifle, una escopeta y una pistola, todas adquiridas «legalmente». Las autoridades estiman que se realizaron «docenas» de disparos.
La respuesta policial fue inmediata y masiva, pero la tensión solo se disipó cuando se confirmó que el tirador, identificado como Robin Westman, de 22 años, se había quitado la vida en el estacionamiento de la escuela, en la parte trasera del edificio. El director del Buró Federal de Investigaciones (FBI), Kash Patel, confirmó que Westman fue el único responsable del ataque.
La tragedia ha provocado una oleada de dolor y solidaridad en la ciudad. Cientos de personas acudieron a las vigilias organizadas en la noche, llevando velas, flores y mensajes para crear altares improvisados en memoria de las víctimas.
Líderes locales y nacionales han expresado su conmoción y apoyo. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se comunicó con el gobernador de Minnesota, Tim Walz, y ordenó que la bandera de Estados Unidos ondee a media asta en todos los edificios públicos y terrenos militares hasta el 31 de agosto. El director de la escuela, Matt Dubois, describió el ataque como «una pesadilla» y elogió la valentía de los maestros y adultos que protegieron a los niños.
El Tirador Publicó un Manifiesto y Videos Aterrados Antes del Ataque
Los detalles sobre el tirador, Robin Westman, han añadido una capa de horror a la ya dolorosa situación. El jefe de policía Brian O’Hara reveló que Westman publicó un manifiesto en su cuenta de YouTube horas antes de perpetrar el crimen. En un video de once minutos, Westman mostraba un gran arsenal y advertía sobre un posible asalto a una iglesia durante una misa. El video también contenía insultos antisemitas.
Además de este manifiesto, Westman había publicado anteriormente otros videos en los que mostraba cargadores de armas largas con mensajes escritos contra el presidente Donald Trump y hacía referencias a individuos que han cometido crímenes similares en los Estados Unidos.
Esta premeditación y la exhibición pública de su ideología han profundizado la consternación de la comunidad y de las autoridades que investigan el caso.
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