Con información de CNN
Las autoridades del norte de Florida se sorprendieron al descubrir a un niño de 10 años al volante cuando pararon un vehículo robado. Según la Oficina del Sheriff del Condado de Alachua, los agentes detuvieron un sedán blanco en la Interestatal 75 poco antes de las 4 de la madrugada del jueves en la ciudad de Alachua. El vehículo fue reportado como robado en North Port, una ciudad en el suroeste de Florida a más de 300 kilómetros de distancia.
Cuando se detuvo el vehículo, los agentes vieron a un niño de 10 años salir del asiento del conductor y a su hermana de 11 años salir del vehículo. Las autoridades se enteraron entonces de que los hermanos también fueron reportados como desaparecidos en North Port y que el vehículo robado pertenecía a su madre, según el comunicado.
Se supo que ambos niños estaban molestos con su madre porque ella les quitó sus dispositivos electrónicos y decidieron cometer el delito. Tras hablar con los niños, los agentes determinaron que no fueron maltratados por nadie en su casa. Su madre, que condujo tres horas para recoger a los niños, no quiso presentar cargos penales.
Los menores no fueron encarcelados después del incidente y las autoridades explicaron que ya que su madre no quiso presentar cargos sobre el vehículo robado, el único «delito es una violación de tráfico».