Con información de Noticias Telemundo.

El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, firmó la ley Laken Riley, la primera norma legislativa de su Gobierno, que exige la detención y posible deportación de personas que están en Estados Unidos sin permiso de residencia y que sean acusadas de robo sin violencia y de crímenes violentos incluso antes de que hayan sido condenadas.

En una ceremonia efectuada en la Casa Blanca, en la que estuvieron presente los padres de la joven asesinada Laken Riley, en la que el primer mandatario afirmó que «firmamos esto en honor a Laken Riley».

La medida fue aprobada rápidamente por el Congreso, controlado por los republicanos, con algún apoyo demócrata, a pesar de que los defensores de los derechos de los inmigrantes la habían criticado por ser tan extrema como para posiblemente desencadenar arrestos por delitos como el hurto menor.

Sin embargo, Trump ha hecho de la campaña prometida contra la inmigración irregular —sin precedentes en la historia de la nación— un elemento central de su carrera política y, hoy sugirió que la ley podría ser solo el comienzo.

“Esta horrible atrocidad nunca debió haber sucedido”, dijo, Trump en referencia al asesinato de la estudiante de enfermería de Georgia. “Bajo la nueva ley el Departamento de Seguridad Nacional debe arrestar a los inmigrantes ilegales que cometan crímenes”, agregó.