Con información de CNN.
El presidente de Estados Unidos Donald Trump firmó este lunes un decreto que ordena tomar medidas enérgicas contra las “jurisdicciones santuario”, o estados y localidades que limitan la cooperación con la aplicación de las leyes federales de inmigración.
El decreto exige la creación de una lista por parte del Departamento de Justicia y el Departamento de Seguridad Nacional que identifique dichas jurisdicciones, las cuales estarán en riesgo de perder ciertos fondos federales y enfrentar acciones legales a menos que cumplan con la aplicación de la ley.
El nuevo decreto migratorio señala que “dentro de los 30 días a partir de la fecha de esta orden, la secretaria de Justicia, en coordinación con la secretaria de Seguridad Nacional, deberá publicar una lista de estados y jurisdicciones locales que obstruyan la aplicación de las leyes de inmigración federales (jurisdicciones santuario). Después de esta publicación inicial, la secretaria de Justicia y la secretaria de Seguridad Nacional deberán actualizar esta lista según sea necesario”.
La orden también exige una verificación de elegibilidad más estricta para los beneficios públicos federales en estas áreas.
Otro decreto firmado este lunes por Trump exige que los conductores de camiones demuestren competencia en el habla del inglés, calificando la orden como un “requisito de seguridad no negociable para conductores profesionales”.
“Mi administración hará cumplir la ley para proteger la seguridad de los camioneros, conductores, pasajeros y otros estadounidenses, incluyendo el mantenimiento de las regulaciones de seguridad que aseguran que cualquier persona al volante de un vehículo comercial esté debidamente calificada y sea competente en nuestro idioma nacional, el inglés”, dice el decreto.
En marzo, Trump firmó un decreto que designó oficialmente al inglés como el idioma nacional de Estados Unidos.
Asimismo, la administración defendió también su decisión de deportar a tres niños estadounidenses durante el fin de semana, argumentando que la decisión fue tomada por los padres, quienes estaban siendo deportados como inmigrantes indocumentados.
La mañana del lunes los reporteros en la Casa Blanca notaron que el Jardín Norte estaba cubierto con docenas de carteles con fotos de personas que, según el Gobierno, están en el país ilegalmente, un movimiento destinado a subrayar los esfuerzos agresivos del presidente Donald Trump para reprimir la inmigración.