El hombre acusado de atacar con un martillo al esposo de la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, dijo a la policía que quería tomar como rehén a la líder demócrata y “romperle las rótulas” para mostrar a otros miembros del Congreso que había “consecuencias de las acciones”.

En una denuncia federal escalofriante, las autoridades dicen que David DePape, de 42 años, que llevaba bridas, cinta adhesiva y una cuerda en un bolso, irrumpió en la casa de la pareja en San Francisco el viernes por la mañana, subió las escaleras donde dormía Paul Pelosi, de 82 años, y exigió hablar con «Nancy», reseña nota de AP. 

“Esta casa y la propia oradora eran objetivos específicos”, dijo la fiscal de distrito de San Francisco, Brooke Jenkins, en una conferencia de prensa el lunes por la noche en la que anunció los cargos estatales contra DePape, incluido el intento de asesinato.

“Esto fue motivado políticamente”, dijo Jenkins por lo que pidió al público vigilar las palabras que se dicen, además de bajar baje el volumen a la retórica política.

Los investigadores creen que DePape había estado investigando con anticipación para apuntar a Pelosi, detalla así que, “esto no fue algo que él hizo en el impulso del momento”.

En un comunicado el lunes por la noche, Pelosi puntualizó que su familia estaba “muy agradecida” por “miles de mensajes que transmitían preocupación, oraciones y cálidos deseos”. Su esposo fue operado por una fractura de cráneo y otras lesiones después del ataque. Ella dijo que estaba haciendo “un progreso constante en lo que será un largo proceso de recuperación”.