La administración de Joe Biden está debatiendo si alivia algunas sanciones a Venezuela para permitir que Chevron Corporation hable directamente con el gobierno del presidente Nicolás Maduro, mientras Estados Unidos busca formas de reactivar las conversaciones estancadas con la oposición política, así lo dijeron personas familiarizadas con el asunto.

Levantar la prohibición de comunicarse con altos miembros del Gobierno de Maduro permitiría a Chevron prepararse para el día en que se levanten las sanciones punitivas a la industria petrolera de Venezuela, algo que, según insiste Estados Unidos, no se está considerando actualmente, explica El Carabobeño. 

También permitiría a Chevron negociar un mayor control sobre sus empresas conjuntas con la petrolera estatal Pdvsa, según las fuentes a las que tuvo acceso el medio especializado en finanzas con sede en Nueva York.

Una persona familiarizada con el asunto reveló que Chevron quiere contacto directo con la vicepresidenta del régimen Delcy Rodríguez y el ministro de Petróleo chavista, Tareck El Aissami, ambos sancionados por Washington. La presencia de Chevron en Venezuela se remonta a la década de 1920 y la empresa trabaja actualmente en cuatro operaciones de riesgo compartido con la estatal Pdvsa.