Un gol de Casemiro a menos de diez minutos para el final rompió el empate a cero entre Brasil y Suiza y manda a los de Tite a los octavos de final del Mundial por la vía rápida, reseña EFE. 

La selección brasileña es la segunda clasificada a octavos, después de Francia, gracias al tanto del centrocampista del Manchester United, que quebró un empate en un duelo especialmente trabajado por parte del equipo suizo. Según lo visto en las dos primeras jornadas, el equipo de Tite sufre en los partidos, toca el balón pero le cuesta descolocar defensas tan bien trabajadas como la Serbia o Suiza.

Suiza presionó a un Brasil sin Neymar -lesionado- donde el barcelonista Raphina asumió el papel protagonista. De sus botas nació la poca magia de la que disfrutó el primer tiempo. De esta manera, Brasil asegura su segunda victoria y su pase a octavos de final. Solo una derrota ante Corea del Sur le impedirá pasar primera de grupo.