La Dirección General de Tráfico en el estado de Florida ha indicado que cada año aumenta más el caso de los conductores en sentido contrario. Sea por imprudencia o por desconocimiento, esto ha producido una media de 10 a 12 heridos de gravedad cada año.
Por esta situación, la ciudad de Orlando implementó un sistema de detección de vehículos en sentido contrario en los nuevos carriles exprés de la autopista I-4. Mientras se realizaba la implementación, el Departamento de Transporte en Florida optó por colocar patrullas en las rampas para evitar el acceso en contravía de los conductores, lo que también significaba un peligro para las autoridades, generando accidentes.
Esta situación fue el paso definitivo para acelerar el funcionamiento del sistema en la ciudad. A través de sensores y cámaras hace parpadear luces rojas, el cual le notifica a los patrulleros el momento exacto en que un automóvil se dirige al carril en dirección opuesta. Al momento que la señal de los sensores y cámaras parpadee, una barrera caería y evitaría la entrada del automóvil.
Este sistema no es nuevo, ya que ha sido exitoso durante años en rutas estatales 417 y 408. La portavoz del El Departamento de Transporte de la Florida Cindi Lane, indicó que en primavera del 2023 estarán listas otras tres rampas con conexión en Grand National, Ivanhoe y Central Parkway, reseña Miami Diario.