Los restos contaminados de la industria minera de fertilizantes de fosfato de Florida, más de mil millones de toneladas en “pilas” que se asemejan a enormes estanques, corren el riesgo de sufrir fugas u otra contaminación cuando el huracán Ian toque tierra en el estado.
Florida tiene 24 pilas de fosfoyeso de este tipo, la mayoría de ellas concentradas en áreas mineras en la parte central del estado. Cada año, se generan alrededor de 30 millones de toneladas de estos desechos ligeramente radiactivos, según el Instituto de Investigación Industrial y de Fosfatos de Florida, indica AP.
“Una gran tormenta como la que nos estamos preparando puede inundar las instalaciones con más agua de la que pueden manejar los estanques al aire libre”, dijo a través de correo electrónico Ragan Whitlock, abogado del personal del grupo ambiental del Centro para la Diversidad Biológica.
“Estamos extremadamente preocupados por los impactos potenciales que el huracán Ian pueda tener en las instalaciones de fosfato en todo el estado”, agregó Whitlock.