Con información de EFE
El expresidente ecuatoriano Rafael Correa afirma que el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio fue un “complot” de la derecha para afectar a la aspirante del correísmo, Luisa González, y además no descarta presentarse de nuevo a las elecciones.
Correa opina que el asesinato hace una semana de Villavicencio, quien fue uno de los mayores detractores de su Gobierno y denunció varios casos de supuesta corrupción, “cambió toda la realidad y pateó el tablero electoral” rumbo a la primera vuelta de la elección presidencial, que será el próximo domingo.
Aunque hay seis presuntos sicarios colombianos detenidos por el magnicidio, Correa señala el presunto rol de Fausto Salinas, comandante general de la Policía Nacional, y de Patricio Carrillo, exministro del Interior y ahora candidato a legislador. Incluso, los vincula con la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos.
El exmandatario asegura que al candidato lo “llevaron a una trampa mortal para que lo acribillen a balazos y lo entregaron a los asesinos” al argumentar que los videos muestran que, justo antes del ataque en Quito, lo suben a un auto que no es el de él, que no estaba blindado y, según el expresidente, sin conductor.