El covid continúa avanzando en el mundo, la vacuna ha disminuido en algunos países el número de afectados pero la pandemia se mantiene. Ahora se conoció que dos compuestos del cannabis identificados por científicos estadounidenses y canadienses pueden prevenir el covid-19, según los resultados de un estudio publicado el pasado 10 de enero en la revista ‘Journal of Natural Products’.

En concreto, se trata de los ácidos cannabinoides CBGA (ácido cannabigerólico) y CBDA (ácido cannabidiolico), que no deben confundirse con el THC, ingrediente psicoactivo de la marihuana. «Estos ácidos cannabinoides abundan en el cáñamo y en muchos extractos del cáñamo», valora, en declaraciones a los medios locales, Richard van Breemen, investigador de Centro de Innovación del Cáñamo del Estado de Oregón (Estados Unidos) en la Facultad de Farmacia y el Instituto Linus Pauling y autor del hallazgo, en colaboración con otros científicos de la Universidad de Ciencias de la Salud de Oregón.

A través de una revolucionaria técnica conocida como espectrometría de masas de selección por afinidad —que permite determinar la distribución de las moléculas de una sustancia y clasificarlas en función de su compatibilidad con otras moléculas—, Van Breemen y sus colaboradores identificaron dos ácidos cannabinoides capaces de unirse a la proteína S del SARS-CoV-2, una envoltura en forma de punta (‘spike’, en inglés) que se adhiere a las células, provocando la entrada del virus en el organismo.

El Confidencial publica que de esta manera, la proteína ‘spike’ se uniría al compuesto del cannabis en lugar de a las células, lo que puede ofrecer nuevas vías para prevenir y tratar la enfermedad. «Eso significa que los inhibidores de la entrada celular, como los ácidos del cáñamo, podrían usarse para prevenir la infección por SARS-CoV-2 y también para acortar las infecciones, al evitar que las partículas del virus infecten las células humanas», ahonda Breeman.

«Cualquier parte del ciclo de infección y replicación es un objetivo potencial para la intervención antiviral y la conexión del dominio de unión del receptor de la proteína ‘spike’ al receptor ACE2 de la superficie celular humana es un paso crítico en ese ciclo», explica.

De hecho, el uso de compuestos que bloquean la interacción entre el virus y el receptor ya se ha demostrado útil para pacientes con otras infecciones virales, como el VIH o la hepatitis. «Estos compuestos se pueden tomar por vía oral y tienen un largo historial de uso seguro en humanos», resaltan los autores del estudio