Con información de DW

El gobierno de Estados Unidos deportó a México al narcotraficante Osiel Cárdenas Guillén, exlíder del Cartel del Golfo y fundador de los Zetas, tras pasar 14 años en prisión.

El Departamento de Seguridad Nacional indicó que «después de 14 años tras las rejas en Estados Unidos, Osiel Cárdenas Guillén, ciudadano mexicano y exlíder del Cartel del Golfo y Los Zetas, ha sido devuelto a México».

La entrega tuvo lugar en un puente fronterizo en la zona del Valle del Río Grande, que hace parte de la frontera con el estado mexicano de Tamaulipas.

Cárdenas Guillén, de 57 años y que enfrenta varias acusaciones en México, pasó el 3 de septiembre de una cárcel en Indiana a estar bajo custodia del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés), a la espera de ser entregado a su país.

Fue uno de los capos más buscados en México y recibió en 2010 una condena de 25 años de cárcel en una corte de Texas, aunque solo cumplió el 75 % de su sentencia.

El jefe criminal se declaró culpable de cinco cargos relacionados con narcotráfico mediante un acuerdo con la Fiscalía, que le retiró otros 12 cargos que le habrían implicado cadena perpetua.

Según la acusación del Departamento de Justicia de Estados Unidos, en su momento de mayor apogeo la organización encabezada por Cárdenas Guillén realizaba actividades de narcotráfico en Houston, Chicago y Atlanta.