loader-image
Doral, US
8:04 pm, Nov 14, 2025
temperature icon 73°F
cielo claro
Humedad 72 %
Presión 1019 mb
Viento 7 mph
Ráfagas de viento 0 mph
Clouds 0%
Visibilidad 10 km
Amanecer 6:38 am
Atardecer 5:33 pm

Con información de DW.

El Departamento de Vehículos de California (DMV) se verá obligado a revocar aproximadamente 17.000 licencias de conducir comerciales (CDL) emitidas a conductores inmigrantes que no poseen un estatus de residente permanente en Estados Unidos.

El Secretario de Transporte de EE. UU., Sean P. Duffy, anunció la medida y arremetió contra el gobernador de California, Gavin Newsom, acusándolo de otorgar licencias comerciales a personas indocumentadas.

Críticas de la Administración Trump y Casos de Accidentes

El Secretario Duffy calificó la situación como “solo la punta del iceberg” y aseguró que su equipo “seguirá presionando a California para que demuestre que ha retirado a todos los inmigrantes indocumentados de los camiones y autobuses escolares”.

La tensión ha escalado tras una serie de accidentes mortales en los que estuvieron involucrados conductores que, aunque contaban con permisos de trabajo federales, han sido catalogados como “ilegales” por la Administración Trump. Como ejemplo, Duffy citó el caso de Harjinder Singh, un conductor con permiso de trabajo expedido por el Departamento de Seguridad Interna (DHS), que fue detenido tras causar un accidente fatal en Florida en agosto.

Requerimientos Federales a California

El DMV de California se ha defendido asegurando que todas las CDL otorgadas se expidieron a inmigrantes que contaban con permisos de trabajo federales.

No obstante, la Administración Federal de Seguridad de Autotransportes (FMCSA) ha exigido a California una auditoría completa de todas sus licencias CDL para no residentes. El objetivo es verificar que se hayan revocado todas las licencias “emitidas ilegalmente” y corregir las deficiencias que permitieron su otorgamiento.

En octubre, el Departamento de Transporte de EE.UU. ya había retenido más de 40 millones de dólares a California tras una investigación que determinó que el estado no cumplía con los estándares de dominio del idioma inglés establecidos para conductores comerciales por el Gobierno federal.