Con información de EFE
Los titulares de la FIFA, Gianni Infantino, y de la Conmebol, Alejandro Domínguez, rubricaron el jueves, junto a los presidentes de Paraguay, Santiago Peña, y de Uruguay, Luis Lacalle Pou, la primera acta del Mundial de 2030, que marcará la celebración por el centenario de esta competencia.
La ceremonia de cara al Mundial que albergarán Argentina, Paraguay, Uruguay, España, Portugal y Marruecos tuvo lugar en la ciudad paraguaya de Luque, donde se celebra el 78 Congreso Ordinario de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol).
Domínguez invitó a Infantino a “reescribir” la historia que arrancó con el primer Mundial, en 1930 en Montevideo, y a los gobernantes presentes a ser parte “de esta historia eterna”.
El dirigente sudamericano exhibió el libro original de las actas elaboradas para el Mundial de 1930, en las que consta con la firma del entonces presidente de la FIFA, Jules Rimet. “Es como encontrar el santo grial o el eslabón perdido; es la esencia pura del Mundial”, afirmó Domínguez sobre el libro histórico y confió en que el documento suscrito en esta fecha sea guardado y vuelto a difundir dentro de 100 años.
Para el Mundial del Centenario Argentina, Uruguay y Paraguay, que fueron candidatas a organizarlo junto a Chile, declinaron su ambición para albergar un solo partido (el inaugural de su selección) en la Copa del Mundo 2030 que celebrarán España, Marruecos y Portugal.