Con información de RT

El nuevo líder del grupo chií libanés Hezbolá, Naim Qasem, aseguró que la victoria de Donald Trump o de Kamala Harris es irrelevante para el desarrollo de la guerra con Israel.

De la misma manera, acusó a EE.UU. de brindar «apoyo ilimitado» al Estado judío tanto en el Líbano como en la Franja de Gaza.

«Nos da igual que gane Harris o Trump porque no dependeremos de los movimientos que haya en la política, pero sí dependemos de lo que ocurra en el terreno», dijo Qasem en un discurso televisado, en el que acusó a EE.UU. de ser «el gran diablo», pero no se pronunció explícitamente sobre la victoria del republicano.

Oriente Medio ha estado aguantando el aliento en las últimas semanas a la espera de los resultados de las elecciones de Estados Unidos y el efecto que tengan en los desarrollos de las guerras en el Líbano y en la Franja de Gaza.

«Los israelíes tienen tres puntos fuertes: el genocidio, matar a civiles y su brutalidad; su capacidad aérea con apoyo ilimitado de EE.UU., el gran diablo; y haber desplegado cinco divisiones en la frontera», dijo Qasem, en referencia a la invasión terrestre que el Ejército israelí lleva a cabo desde el 1 de octubre.

Respecto a los desarrollos sobre el terreno, el nuevo jefe de Hezbolá aseguró que los soldados de Israel «están parados en la frontera con miedo a enfrentarse», pese a que en el último mes se han producido intensos choques entre las partes en decenas de aldeas fronterizas a lo largo del sur del Líbano.