La misma semana en que se celebró en Estados Unidos el Día de Martin Luther King, miles de personas contrarias a los mandatos de vacunas y de llevar mascarillas en Estados Unidos emularon al defensor de los derechos de los negros con una gran manifestación durante el domingo 23 de enero en Washington para reclamar “libertad médica”.
Provenientes de todos los rincones del país y arengados por las voces más destacadas del mundo antivacunas en EE UU (incluido Robert F. Kennedy Jr., sobrino del presidente John F. Kennedy e hijo del senador Robert Kennedy), los manifestantes se citaron en el céntrico National Mall de la capital estadounidense.
EFE reseñó que desde el memorial de George Washington marcharon a lado y lado de la piscina reflectante hasta llegar al monumento a Abraham Lincoln. En el lugar tuvieron lugar los discursos de los organizadores, muchos de ellos doctores.
Ese monumento es el mismo enfrente del cual en 1963 el reverendo Martin Luther King pronunció su famoso discurso “Tengo un sueño” a favor de las libertades de los negros. Y tanto los organizadores de la marcha como los propios manifestantes antivacunas no dudaron este domingo en establecer paralelismos entre las dos causas.
Entre los manifestantes, tanto jóvenes como mayores y llegados de puntos tan lejanos a Washington como Arizona y Texas, las referencias y citas a King también fueron habituales, como por ejemplo en un cartel en que se leía una cita del histórico activista: “La injusticia en cualquier parte es una amenaza para la justicia en todas partes”.
“Yo no soy antivacunas. Yo lo que soy es antimandatos. Lo que yo digo es que cada uno debe poder elegir lo que quiere: vacunarse o no; llevar mascarilla o no”, dijo a EFE Nadia Zoltan, una mujer mayor con el pelo ya grisáceo que se desplazó a Washington desde Pensilvania junto a su marido y a sus dos hermanas.