Un índice del portal inmobiliario RealtyHop y reseñado por Infobae reveló que Miami se convirtió en el mercado de la vivienda menos asequible de Estados Unidos, superando a Nueva York y Los Ángeles.

El área metropolitana de Miami, en el sur del estado de Florida (sureste), ya era un destino atractivo antes del arribo del covid-19, con su buen clima, sus playas de arena blanca y su ausencia de impuestos sobre la renta. Una ciudad global, especialmente interesante para los compradores e inversores latinoamericanos y europeos.

Pero la pandemia acentuó el fenómeno. Los duros confinamientos impuestos en otras ciudades de Estados Unidos y el consecuente auge del teletrabajo, que permitió a la gente ejercer su oficio desde cualquier lugar, llevaron a muchos a mudarse al sur de Florida. Las consecuencias no se hicieron esperar. La llegada de esos nuevos habitantes con empleos mejor remunerados hizo aumentar fuertemente los precios de las rentas

Según el índice de asequibilidad de febrero de RealtyHop, que analiza a las 100 ciudades más pobladas de EEUU, el precio de la vivienda en Miami ha ido en aumento desde el año pasado, y la tendencia ha continuado en 2022. “La ciudad ha pasado a ser el mercado de la vivienda menos asequible del país. Los hogares tendrían que contribuir con el 78,71% de sus ingresos a los costes de propiedad de la vivienda, lo que supone un aumento del 1,55% respecto al mes pasado”, explicó. Esto se basa en un precio medio de la vivienda de USD 589.000 y un ingreso medio familiar proyectado de USD 43.401.

Los alquileres también se han disparado exponencialmente en Miami: en 2021 aumentaron un 38%, las mayores ganancias a nivel nacional.

Un informe de Florida Realtors descubrió que, por ejemplo, los asistentes de atención médica a domicilio y de cuidado personal, que son los que menos ganan de las 17 ocupaciones estudiadas, necesitarían ganar más del triple de su salario medio anual para comprar una vivienda, y casi el doble de su salario para alquilar una unidad de un dormitorio.

Por otro lado, la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAR) informó el viernes que las ventas de viviendas previamente ocupadas en Estados Unidos aumentaron en enero debido a una mayor cantidad de compradores con dinero en efectivo y otros deseosos de evitar las tasas hipotecarias más altas que se apoderaron de los créditos, dejando el número de casas disponibles en el mercado en un mínimo histórico.

Las ventas de viviendas existentes aumentaron un 6,7% el mes pasado con respecto a diciembre, hasta una tasa anual desestacionalizada de 6,5 millones, según informó la NAR. Eso es más que los aproximadamente 6,08 millones de ventas que los economistas habían estado esperando, según FactSet.

Las ventas cayeron un 2,3% respecto a enero de 2021, mientras que el precio medio de la vivienda aumentó un 15,4% respecto al año pasado por estas fechas, hasta los USD 350.300.