Irina McCarthy, de 35 años, y Kevin McCarthy, de 37, murieron acribillados después de que un francotirador abriera fuego desde el techo de un edificio contra los espectadores de un desfile del 4 de julio en la localidad de Highland Park.

Su hijo Aiden fue encontrado cubierto de sangre debajo de un hombre moribundo. Una mujer en estado de shock se acercó a Greg Ring en medio del caos y le entregó un niño de 2 años cubierto de sangre. Ring acababa de huir de la escena en Highland Park con su esposa y sus tres hijos a una zona detrás de un popular restaurante de panqueques, reseña AP. 

“Nos miramos a los ojos y no dijimos nada… Extendí los brazos y ella me lo dio”, detalló Ring el miércoles, al describir el intercambio con la mujer que no conocía y quien luego se acostó frente a su auto, en estado de shock.

El niño señaló en dirección a la ruta del desfile, diciendo: “Mami, Papi, Mami, Papi”. El deseo de Ring de ayudar al pequeño lo llevó de regreso a la escena por lo que decidió poner la cara del niño en su pecho para que no viera la masacre, pero rápidamente se dio cuenta de que era demasiado peligroso.

“¡Tirador activo! ¡Agáchate!”, gritó un policía, razón por la cual, Ring volvió a huir.

Él y su familia subieron a su vehículo y llevaron al niño a una estación de bomberos de Highland Park. “Tengo un niño. No es nuestro”, le dijo al personal del departamento, que le pidió que se quedara con el pequeño mientras las autoridades buscaban al agresor y ayudaban a los heridos.

La familia condujo hasta la casa de los suegros de Ring. Allí, el pequeño se sentó con el hijo de 4 años de Ring a ver un programa de Mickey Mouse. “Le pidió a mi esposa que lo limpiara porque tenía sangre que no era de él”, comentó Ring quien es agente de seguros de Highland Park.

A través de los medios de comunicación también se conoció que, fue creada una cuenta en el sitio de recaudación de fondos GoFundMe para asistir a Aiden que en poco más de 12 horas acumuló casi US$2 millones, el pequeño ahora será cuidado por sus abuelos.