La primera dama de Estados Unidos, Jill Biden, visitó este viernes un centro de investigación contra el cáncer en Tampa, Florida, para impulsar el programa «Cancer Moonshot», que podría reducir la tasa de mortalidad por esta enfermedad en al menos un 50 % durante los próximos 25 años, según la Casa Blanca.
Acompañada del director del Instituto Nacional del Cáncer, el doctor Ned Sharplessla, la primera dama estadounidense elogió el trabajo que realiza el H. Lee Moffitt Cancer Center & Research, el único centro oncológico integral de Florida designado por el Instituto Nacional del Cáncer. El centro ubicado en Tampa (oeste) utiliza el programa Cancer Moonshot, que promueve la actual Administración para la detección precoz del cáncer.
«Están trabajando muy duro», señaló visiblemente complacida la primera dama, quien vestía un traje de chaqueta azul y llevaba mascarilla.
En estos momentos, el presidente, Joe Bide, y la primera dama han hecho un llamamiento a más estadounidenses para que se hagan las pruebas de detección de cáncer que no se realizaron debido a la pandemia de covid-19, indica EFE.
Jill Biden se reunió con investigadores del centro Moffitt, donde le mostraron el programa gratuito de detección de cáncer de piel denominado «Mole Patrol» (Patrulla Mole). Además, visitó uno de los lugares más exclusivos de la institución médica, el Departamento de Oncología Matemática, según reseñan medios locales.