Con información de EFE

Al menos tres personas murieron en un pueblo del noroeste de Texas tras el paso de un tornado el miércoles, así lo informó un funcionario, en medio de las tormentas que azotaron partes del oeste y centro de EEUU y que provocaron al menos 11 informes de tornados en cuatro estados.

El tornado llegó la noche del miércoles a Matador, una localidad de unos cientos de habitantes situada a unos 280 kilómetros al noroeste de Dallas, Texas, según dijo la oficina del Servicio Meteorológico Nacional en Lubbock. El alcalde de Matador, Pat Smith, declaró que se habían producido tres muertes. El número de víctimas incluye a una anciana que murió en su casa, así lo manifestó la alcaldesa pro tempore Dvonna Grundy.

El tornado destruyó la casa de Grundy —dejándola sin ropa ni medicinas— y dispersó o mató gran parte del ganado que tenía en su propiedad.

Esta es la segunda vez que un tornado mortal azota Texas en menos de una semana. El 15 de junio, un tornado causó al menos tres muertos y decenas de heridos en la ciudad de Perryton, en el Panhandle de Texas, a unos 180 kilómetros al norte de Matador, según informaron las autoridades.

Según el Centro de Predicción de Tormentas, el miércoles se registraron al menos 11 tornados en el oeste y centro de EEUU, seis de ellos en Colorado, tres en Texas, uno en Wyoming y uno en Nebraska. Los residentes de Texas y Oklahoma también están luchando esta semana contra temperaturas extremas —por encima de los 37,7 grados centígrados en algunas zonas—, mientras cientos de miles de personas siguen sin suministro eléctrico tras las devastadoras tormentas.