Con información de DW
Miembros una violenta pandilla de supremacistas blancos fueron acusados por comercializar drogas en California.
Autoridades policiales indicaron que durante el procedimiento se les decomisó un arsenal de armas ilegales y potentes drogas. Entre ellas fentanilo, el opioide sintético que causa miles de muertes en Estados Unidos.
De la misma manera, las autoridades calificaron como un duro golpe contra una organización criminal neonazi.
El procedimiento policial se registró en diversas redadas simultáneas contra los Peckerwoods del Valle de San Fernando, una pandilla que opera cerca de Los Ángeles.
Durante el operativo actuaron funcionarios de Policía de Los Ángeles, quienes lograron la captura de 29 activistas en el Valle de San Fernando.
Asimismo, trascendió que la acusación vincula a un total de 68 supuestos miembros de la pandilla por una veintena de delitos federales, entre los que se incluyen conspiración para violar la Ley de Organizaciones Corruptas e Influenciadas por el Crimen Organizado (RICO), narcotráfico, fraude bancario, robo de identidad agravado y delitos relacionados con armas de fuego, entre otros.
Al respecto, el fiscal estadounidense, Martin Estrada indicó que «la violenta ideología de los supremacistas blancos Peckerwoods y su amplia actividad criminal amenazan a nuestra comunidad».
«Al supuestamente alinearse con todo, desde tráfico de drogas a delitos con armas de fuego, robo de identidad, fraudes con Covid, y con su alianza con una pandilla neonazi de la cárcel, los Peckerwoods son una fuerza destructiva», añadió.