Con información del Diario las Américas.
En un encuentro con líderes comunitarios, la congresista republicana María Elvira Salazar presentó su ambicioso plan de reforma migratoria, la llamada Ley Dignidad. Salazar expuso su proyecto como una solución pragmática y viable para un sistema «roto».
La propuesta, que busca apoyo de figuras clave como el presidente Donald Trump, se centra en el Programa Dignidad.
Este programa otorgaría un estatus legal temporal y renovable por siete años a inmigrantes indocumentados que cumplan requisitos estrictos, como haber residido en el país desde antes de 2021, pasar verificaciones de antecedentes penales y pagar una tarifa de $7,000.
La congresista fue enfática al aclarar que su plan no constituye una amnistía ni un camino hacia la ciudadanía, sino que busca dar «un camino digno para quedarse» y seguir trabajando legalmente.
La Ley Dignidad también incluye la expansión del sistema E-Verify para empleadores, protección para los «Dreamers» y una fuerte inversión en seguridad fronteriza.

