Jason Jenkins, quien pasó casi 14 años con los Miami Dolphins y finalmente se convirtió en el vicepresidente senior de comunicaciones del equipo, murió inesperadamente el sábado a sus 47 años. 

Jenkins se unió a los Dolphins en 2009, luego de pasar casi siete años trabajando con los San Francisco 49ers. También trabajó en Texas Southern, Lehigh y Texas Tech, su alma mater, que le pidió que pronunciara un discurso de graduación en 2018.

“Estoy aquí para decirles que no será su geografía la que marque su viaje”, dijo Jenkins en ese discurso. “Serán tres cosas: la profundidad de sus relaciones, la base de sus valores y el valor de su toma de decisiones. Así que mi carrera y mi vida han sido impresionantes”.

Al nativo de Houston le sobreviven su esposa Elizabeth y sus tres hijos. Los Dolphins anunciaron su muerte durante su juego de pretemporada el sábado contra Filadelfia, de acuerdo a lo que reseña AP.