Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos  (CDC, por sus siglas en inglés) afirmaron el viernes de acuerdo a lo que indica CNN, que existe un posible problema de seguridad con la vacuna bivalente contra el covid-19 fabricada por Pfizer y BioNTech, pero que es poco probable que represente un riesgo real. La agencia dijo que sigue recomendando a las personas que se mantengan al día con las vacunas contra el covid-19.

Los CDC señalaron que uno de sus sistemas de control de la seguridad de las vacunas, un «sistema de vigilancia casi en tiempo real» denominado Vaccine Safety Datalink (VSD), detectó un posible aumento de un determinado tipo de apoplejía en personas mayores de 65 años que habían recibido recientemente una de las vacunas de refuerzo actualizadas de Pfizer.

Un análisis de respuesta rápida de esa señal reveló que las personas mayores que recibieron un refuerzo bivalente podrían ser más propensas a sufrir este tipo de accidentes cerebrovasculares en las tres primeras semanas después de sus vacunas, en comparación con las semanas cuatro a seis.

Según los CDC, no se ha detectado la misma señal de seguridad con el refuerzo bivalente de Moderna. Sin embargo, los CDC señalan que han buscado y no han encontrado el mismo aumento de accidentes cerebrovasculares en otras grandes recopilaciones de historiales médicos, incluidas las mantenidas por Medicare, el Departamento de Asuntos de Veteranos de EEUU, así como su Sistema de Notificación de Efectos Adversos de Vacunas, conocido como VAERS.

Ni Pfizer ni otros países que utilizan la vacuna han observado un aumento de este tipo de accidentes cerebrovasculares, según la agencia, y la señal no se detectó en ninguna otra base de datos.